Estrategia para reducir la rotación del personal
Es conocido que la rotación de empleados es uno de los grandes problemas que afrontan o que pueden llegar a afrontar las organizaciones. De acuerdo a estadísticas, las tasas de rotación en la mayoría de las industrias oscilan entre el 25%, por lo que atender este asunto ayudará a cuidar la rentabilidad de la organización, además de que se asegurará de contar con el personal necesario para alcanzar los objetivos del negocio.
Entonces, ¿cómo reducir la rotación de personal?
Estrategia para reducir la rotación del personal
Múltiples estudios realizados a nivel internacional, como el de Randstad, señalan que la rotación del personal tiene como origen las mismas causas: sueldo y falta de beneficios corporativos,ya que los colaboradores quieren progresar tanto en su vida personal como profesional. Debe ser un objetivo de la empresa, asegurar que sus trabajadores logren alcanzar una estabilidad entre su vida personal y laboral.
Una forma de alcanzar dicha meta es mediante la aplicación de experiencias y remuneraciones que aporten al colaborador un valor agregado, así como una motivación intrínseca.
Incentivos no monetarios para reducir la rotación del personal
Los incentivos no monetarios son un beneficio que añade valor a la vida de los empleados, en lugar de darles un aumento de efectivo. Además, tienen la ventaja de apelar a las emociones de los trabajadores de la empresa, ya que en lugar de recibir una cantidad de dinero extra, perciben el beneficio como algo más personal y memorable.
Asimismo, los incentivos no monetarios son una gran herramienta para retener puestos de trabajo difíciles de cubrir o con habilidades de gran demanda.
Incentivos no monetarios como motivación
Pensar que el dinero es la única fuente de motivación para las personas, impide que se integren o propongan nuevos métodos para incentivar a los colaboradores. Lo cual es sumamente importante, ya que es una clave primordial para estimular a los trabajadores, debido a que no toda la fuerza laboral se motiva por igual.
De hecho, distintos estudios demuestran que los incentivos monetarios motivan solamente en el corto plazo; mientras que los incentivos no financieros mantienen una vigencia a largo plazo.
Los empleados que más se sienten valorados son los que más duran en un trabajo, y los incentivos no monetarios son una forma de decirle que importan; por ejemplo, viajes, días libres, formación, beneficios corporativos de bienestar, etc.
Si el punto de los incentivos laborales es impulsar a los trabajadores a conseguir sus metas, los beneficios corporativos de bienestar son ideales, ya que al ofrecer un servicio wellness, como la actividad física, se estimula a los colaboradores a conseguir sus objetivos. Puesto que estos logros son grandes victorias para los individuos, los cuales aumentarán su seguridad y, en consecuencia, estarán más orientados a alcanzar nuevas metas, como las laborales.
Asimismo, las necesidades fisiológicas son primarias y, por lo tanto, necesarias en el individuo, por lo que es importante mantener el cuerpo en movimiento y fomentar su funcionamiento.
Ejercicio y la motivación laboral
Si tus colaboradores realizan ejercicio con regularidad, cambia su química cerebral, ya que estimula la glándula pituitaria y libera endorfinas. No requieren pesados entrenamientos o ser atletas de alto rendimiento, con 20 a 30 minutos basta para que mejore su estado de ánimo y su motivación, es decir, implementar incentivos no monetarios enfocados en el bienestar, estimula a que los empleados mantengan la motivación a largo plazo.
Incluso, la actividad física impulsa la productividad de la empresa a trabajar más duro: el ejercicio mantiene su mente y cuerpo en la mejor forma.
En el libro Happiness at Work: Maximizing Your Psychological Capital For Success se calculó que una persona promedio trabaja alrededor de 90.000 horas en su vida. Al ser una cantidad de tiempo considerable es vital que los colaboradores se mantengan saludables en cuerpo y mente, para aportar un buen ritmo de productividad a la empresa. Por lo que ofrecer incentivos no monetarios de bienestar promoverán el equilibrio entre la vida personal y laboral.
Esto en consecuencia, aumentará la permanencia del talento dentro de la empresa y reducirá la rotación del personal, ya que un colaborador que se siente motivado con sus tareas, no solamente va a trabajar con gusto, sino que genera un mayor sentido de pertenencia con una organización e incrementa su productividad.
Referencias:
https://www.netsuite.com/portal/resource/articles/human-resources/reduce-employee-turnover.shtml
https://splashbi.com/pdf/how-to-reduce-employee-turnover.pdf
http://biblio3.url.edu.gt/Tesario/2013/05/43/Dominguez-Tito.pdf
https://blog.vantagecircle.com/non-monetary-incentives/