En la actualidad, las empresas se enfrentan a desafíos cada vez más complejos en su búsqueda de competitividad y éxito sostenible. En este contexto, es crucial comprender cómo es el liderazgo hoy en día. 

De acuerdo con un estudio de Gallup, los equipos liderados por personas centradas en los individuos experimentan un 70% menos de rotación de personal, un 21% más de rentabilidad y un 41% menos de ausentismo laboral. Por lo tanto, es importante conocer cómo adoptar un enfoque de liderazgo orientado a las personas para generar un impacto positivo tanto en los colaboradores como en los resultados empresariales. 

¿Cómo ha ido evolucionando el liderazgo?

A lo largo de la historia, el liderazgo se ha transformado para adaptarse a las necesidades cambiantes de la sociedad. En sus inicios, estaba ligado al poder y la autoridad, con dirigentes que imponían su voluntad mediante el miedo y la presión. Sin embargo, con la complejidad creciente de las sociedades, surgió la necesidad de gerentes más efectivos en la guía de sus seguidores. 

En el liderazgo clásico, que abarcó desde tiempos antiguos hasta el siglo XIX, se valoraban cualidades como valentía, fortaleza, riqueza o astucia; estos líderes ofrecían seguridad a cambio de lealtad. Durante el siglo XX, experimentó cambios significativos debido a los avances tecnológicos y la rápida difusión de la información. Los dirigentes debían adaptarse a los cambios rápidos y comprender su importancia. 

En el siglo XXI, el liderazgo enfrenta nuevos desafíos en los ámbitos empresarial y social. Se requieren líderes capaces de manejar la incertidumbre, los cambios constantes, la flexibilidad organizativa y la responsabilidad social. 

El enfoque se ha desplazado hacia un liderazgo centrado en la persona, en el que el individuo se convierte en el centro de los procesos en una organización, comunidad o sociedad. Estas demandas se extienden más allá del ámbito organizacional y afectan a todo el entorno social. 

¿Qué es el liderazgo centrado en la persona? 

Se basa en la premisa de que el talento humano es el activo más valioso de una organización. Reconoce la importancia de comprender y atender las necesidades, motivaciones y aspiraciones de los colaboradores, y fomenta su crecimiento personal y profesional. Este enfoque no solo se preocupa por la productividad y los resultados económicos, sino que también busca crear un entorno de trabajo saludable, motivador y enriquecedor para todos.

Bienestar y salud: Clave para el éxito empresarial 

Para entender cómo es el liderazgo hoy en día debemos hablar sobre el bienestar y la salud, ya que un estilo de vida saludable no solo beneficia al equipo humano individualmente, sino que también puede tener un impacto significativo en los resultados empresariales. 

Cuando adoptamos el liderazgo orientado en la persona, el bienestar de los colaboradores es crucial, al estar sanos y equilibrados, son más felices, comprometidos y motivados, lo que se traduce en una mayor productividad y un mejor desempeño laboral. Además, un enfoque en el bienestar y la salud puede reducir los costos asociados con la atención médica y el ausentismo laboral, mejorando así la rentabilidad de la empresa.

Los mejores videos de Liderazgo 

Presentación de «Liderazgo centrado en la persona» por Ricardo Murcio: 

En la presentación del Dr. Ricardo Murcio sobre el liderazgo centrado en la persona, resalta que la capacidad de inspirar a los demás es lo que realmente distingue a un auténtico dirigente. Sin embargo, es importante tener en cuenta que todos poseemos esta capacidad de liderazgo innata, tal como lo menciona el autor Carlos Llano. 

Murcio nos invita a reflexionar, ya que se trata de un rol sumamente fundamental dentro de las organizaciones que tiene la capacidad de impulsar al talento humano hacia metas y objetivos de gran alcance. Por ende, mantener a los miembros del equipo en constante capacitación, potencia su capacidad para lograr resultados exitosos. 

El liderazgo del futuro- Pedro Padierna

Según lo comentado por el ponente Pedro Padierna, es fundamental que el rol de Recursos Humanos evolucione para atender las necesidades de las personas y así lograr el éxito empresarial, considerando que los seres humanos son el recurso más valioso de las empresas. 

En la actualidad, las habilidades únicas del ser humano para la creación de tecnología han cambiado la forma en que las empresas operan. Las relaciones humanas juegan un papel clave, tanto con los clientes como con los colaboradores. Es necesario colocar al ser humano en el centro, lo que resulta en colaboradores más comprometidos y alineados con los valores de la empresa. 

Comprendiendo las necesidades de los colaboradores, fomentando su crecimiento personal y profesional, y promoviendo programas de bienestar, las organizaciones pueden lograr un mayor compromiso, productividad y satisfacción laboral. Esto también permite comprender mejor al cliente y adaptarse a sus necesidades, generando un impacto positivo en los resultados empresariales y en la experiencia del cliente. 

Invertir en el bienestar y desarrollo de los colaboradores es una inversión estratégica que conduce al éxito sostenible de la organización. Si quieres profundizar en ello, te compartimos la grabación de la conferencia privada de Pedro Padierna. 

Ve aquí el seminario El futuro del liderazgo. 

Manpower – Mario Alonso Puig

Mientras, el mentor del área de Neurociencia del Liderazgo, Dr. Mario Alonzo Puig, en su masterclass: “El Liderazgo centrado en la persona”, nos revela que este concepto tiene poco que ver con el deseo de mandar y mucho más con el deseo de servir. Implica dedicarse a descubrir y potenciar el talento innato que reside en cada individuo, permitiéndolo florecer y alcanzar su máximo potencial, y de esta forma lograr los objetivos planteados en la organización. 

En resumen, al proporcionar oportunidades para el cuidado de la salud física y mental del talento, se crea un ambiente de trabajo favorable que fomenta el equilibrio entre la vida laboral y personal. Esto fortalece el compromiso y la conexión emocional de los equipos de trabajo con la empresa, lo que a su vez se refleja en un mayor rendimiento, una mayor satisfacción en el trabajo y una disminución en la rotación de personal.